Fábula del rabo
Estaba un toro pastando en la dehesa, y llegó una mosca cojonera de estas que empiezan a posarse dando el coñazo.
El caso es que se le posó al toro en el culete y éste la espantó con el rabo. La mosca echó a volar y se volvió a posar en el culete.
El toro volvió a sacudirle con el rabo, así que la mosca voló y se posó esta vez un poco más hacia delante, en el costado del toro. El toro hizo un esfuerzo y volvió a alcanzar a la mosca con el rabo. La mosca, que ya estaba mosca con el rabo se posó entonces en el hocico del toro, donde éste no podría llegar con el rabo… de repente el toro sacó la lengua y, ¡glup!, se papeó la mosca…
MORALEJA: Lo que no puedas terminar con el rabo, termínalo con la lengua…
Fábula del coche
Resulta que, un día, un toro cayó en un pantano de arenas movedizas. En ese momento pasaba una hormiguita y el toro le pidió auxilio.
La hormiguita subió a su flamante y recién estrenado Audi A3 TDI 110 CV, amarró una cuerda al rabo del toro y otra al chasis del coche, y sacó al toro de las arenas movedizas. El toro le estuvo eternamente agradecido y prometió ayudar a la hormiguita en lo que le pasara.
Pasaron los meses y, un día, el toro pasó por el mismo sitio y vio a la hormiguita dentro y pidiendo auxilio, el toro alcanzó a la hormiguita con su rabo y la sacó de allá.
MORALEJA: Si tienes un buen rabo, no necesitas un A3 TDI.
Fábula del pajarito
Esto es un conejito que iba por el bosque y se pone a llover a cántaros.
Busca refugio y encuentra un árbol hueco, pero dentro había un pajarito.
Le dice:
—¡Pajarito, Pajarito! ¡Déjame entrar en el árbol, que me estoy mojando!
A lo que responde el Pajarito:
—No te dejo, que no hay espacio para los dos.
Y el conejito vuelta a insistir:
—¡Venga, Pajarito, que voy a pillar una pulmonía!
Y el Pajarito:
—¡Que te he dicho que no!
Llovía cada vez mas y el conejito estaba ya chorreando.
—¡Venga, Pajarito, que tengo mucho frío! —insistió el conejito.
—No te lo repito más, ¡si digo que no, es que no! —afirmó con rotundidad el Pajarito.
MORALEJA: Cuanto más duro se pone el pájaro, más se moja el conejo.