Viva la sutileza masculina, los hombres somos así!
Un hombre y su esposa están a punto de meterse en la cama. La mujer se para frente al espejo (como todas), se mira y comenta:
¿Sabes, querido? Me miro en el espejo y me veo tan fea, tengo arrugas en la cara, los pechos se me están cayendo y el trasero también, tengo las piernas gordas y los brazos flojísimos.
Se da la vuelta y mirando a su esposo, le pide: Sé bueno, dime algo positivo, algo que me haga sentir mejor.
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